Mi foto
Ghost. We're all haunted here.

lunes, 24 de junio de 2013

Como si Colin creyera todavía en las pérdidas.

Pitia escupe la sangre y se sentiría patética si sintiera algo en absoluto, algo que no fuera el sabor metálico del paladar y las manos de Colin recogiéndole el pelo en la nuca. Casi puede imaginárselo, detrás de ella, con esa expresión indescifrable de cuando está triste.

Claro que está triste.

-Debe de ser una putada que todo lo que te queda en el mundo se esté muriendo, ¿no, McGrawson?

(Porque Rasputín no cuenta
y en realidad Loras nunca contó.)

martes, 4 de junio de 2013

and nobody has to guess that baby can't be blessed.

Conduce con calma, rodando por las calles como si supiera exactamente a dónde va. Pero no tiene prisa, claro que no tiene prisa, porque no la tiene nunca, y Cher se siente más incómoda que en toda su vida, viéndola de perfil, los ojos fijos en la carretera y el mismo gesto adusto que cuando la conoció. Se siente fuera de lugar, en ese coche tan grande con esa chica tan pequeña.

-Mira, Cheryl. -Empieza a hablar y ahí está otra vez, ese odio contenido que no, no va hacia ella, por supuesto. No la mira y gira el volante.- Sé qué clase de persona eres. Te sentías demasiado grande para el estanque tan pequeño que era tu pueblo y lo entiendo, y te fuiste a la ciudad, pensando que te reencontrarías con tu padre o que un tío muy majo te alquilaría una buhardilla indie y que trabajarías en un Starbucks durante un tiempo, antes de despegar, conocer a alguien y ser una de esas protagonistas jovencitas de comedia romántica. Vale. Lo entiendo, mira, es un buen sueño. Modesto, pero un buen sueño. Tendrías que haber leído menos, en mi opinión. -La voz de soprano se rompe un poco en esa última frase, como si le doliera algo dentro.- La primera parte del plan se torció y te encontraste con Louie, que es un actor bastante malo pero miente bien, y sabe fingir que es toda esa libertad que buscabas, y aceptaste la mano que te tendía. Eras muy grande para Crenbay, pero eres muy pequeña para todo esto, chica. Lo siento. Y sé que lo pasas fatal cuando Alistair te pide un favor y eso es absolutamente normal, pero también sé que eres la clase de persona que ve buenas intenciones donde parece que las hay. Eso es un error. No quiero que te equivoques conmigo. No estoy haciendo nada por vosotros. -Y la mira de reojo y Cher traga saliva, porque no sabe si tiene razón pero algo le dice que sí, y nada en su expresión le está diciendo que le mienta, que tenga algún motivo para ello.- Si os protejo es porque no tengo otro remedio. Y si os ayudo... Mira. Es un daño colateral. -Como la bofetada de Alistair que aún lleva en la calcárea mejilla (Cherry no la vio pero la oyó, y, joder, dolería seguro), como Lester despareciendo o la navaja en la mano de Gabe.- Me da enteramente lo mismo ser vuestra salvadora o la mala de vuestra opereta. No busques más, porque no hay. No me importáis lo más mínimo. Pero, Cheryl Bledvins, si me haces un favor, ten por seguro que te lo devolveré. Y también funciona al revés. Jódeme y estás jodida. -Le dedica una sonrisita encantadora antes de parar frente al apartamento y baja después de ella.

El décimo escalón cruje bajo sus pies cuando entiende que es cierto, que ellos se han metido en su plan de venganza y no van a poder evitarlo. Se gira para mirarla, la diferencia de altura aún más evidente porque Cher está más arriba, como si eso pudiera cambiar las cosas. Ella ladea la cabeza, un suspiro de paciencia y esa expresión otra vez. Sorpréndeme.

-¿Vas a seguir con esto? ¿Caiga quien caiga?
-Veo que ya lo vas entendiendo.

(Los imperios se rompen desde dentro y la pequeña señorita lo sabe bien.)